Categoría: Industria

  • Feliz cumpleaños Google o el perfil de la última gran empresa exitosa.

    Feliz cumpleaños Google o el perfil de la última gran empresa exitosa.

    google 11Es poco lo que se puede decir de Google que no sea, hasta cierto punto, un lugar común. Sus aportes, los grandes cambios inducidos a la industria de la tecnología, su peculiar ambiente de trabajo, el famoso tiempo Google de sus empleados, son todos puntos más o menos conocidos por la mayoría.

    Sin embargo, yo quisiera ir hacia un punto distinto, menos explorado si se quiere: la premisa de no hacer el mal. Se suele decir que el capital no tiene patria, y muchos agregarán que tampoco cuenta con moral. La idea de hacer negocios y con esto crear cosas buenas debería de ser el norte de toda empresa sin importar su tamaño. Pero hay algunas empresas que en su momento de mayor expansión, olvidan este gran consejo y se dedican a torpedear a los competidores, en lugar de mantener su evolución propia.

    Muchos son los ejemplos de esto en distintas áreas, especialmente en tecnología. Google, quizás junto a IBM y RIM, es de las pocas empresas que aún teniendo ingresos por más de 20.000 millones de US$ el año pasado, sigue empeñada en crear nuevos mercados, sin atacar a sus usuarios ni competidores de forma tan tajante. Por supuesto que hay rivalidad, y que se pelea fuertemente en estas empresas, pero también es cierto que no se detienen a perder el tiempo esperando resultados de juicios y demandas.

    La historia está llena de ejemplos de empresas que una vez que llegaron al tope, se dedicaron a frenar las iniciativas de los demás, en lugar de seguir creciendo. Es así como Motorola, después de ser el número uno sin discusión del mundo de la telefonía móvil, sucumbió ante Nokia. Pero esta última también se precipita por la misma ruta. Las marcas chinas, y otras asiáticas, están desplazándolos en el mercado, a base de costos bajos y calidad cada vez mejor. Mientras, ellos se sientan a esperar que su reputación los salve, y que su nombre quite del camino a otros competidores.

    Y para algunos de mis conocidos, Google empieza a caer en esta maniobra, con iniciativas como Android y Chrome OS. Pero conociendo la trayectoria de Google, esos intentos tienen una intención por detrás, mucho más importante: los futuros servicios de Google requieren más que los sistemas de hoy o, en el peor de los casos, necesitan de una plataforma que otra empresa no pueda bloquear.

    Es quizás como el caso de Newton, que desarrollo toda su versión del Cálculo Diferencial, para poder resolver un problema, trayendo bienestar a toda la comunidad científica. Vemos a Google, entrar a nichos de mercados que no existen, como en el caso de Android, para generar nuevos servicios, que aunque no serán dominados a totalidad por ellos, sí les permite crecer y jugar un papel preponderante. ¡Y hacer el bien al mismo tiempo!

    Y es que pocas empresas en esta última década, nos han hecho estar hablandodeti como Google.

  • ¿Realmente necesita un PR? ¿ó un periodista? ¡No! lo que necesita son seguidores.

    ¿Realmente necesita un PR? ¿ó un periodista? ¡No! lo que necesita son seguidores.

    journalisticsPara seguir ahondando en un tema que ha levantado polémica, me permito plantear el par de preguntas que desde el título se asoman.

    Una entrada en un blog que acabo de descubrir –el cual recomiendo ampliamente— se plantea la pregunta de si las empresas necesitan aún una agencia de PR. Al leerlo –y esta impecablemente escrito—se encuentra con el razonamiento de un PR que sólo expone los hechos, sin tomar partido de manera marcada. De alguna forma Jeremy Porter, se pasea por las mismas consideraciones que antes realice en el post PR 2.0: un RobinHood perverso –ese que trajo tanto ruido en la fuente y del que estoy escribiendo una segunda parte pero con la lupa puesta en el periodista—sólo que lo encara desde el punto de vista de las agencias de PR y teme por el futuro de las mismas.

    Les recomiendo lean el post en cuestión –está en inglés en la dirección http://blog.journalistics.com/2009/do_you_still_need_a_pr_agenc/ — y reflexionen un poco sobre la posición del autor que plantea que, en esta realidad llena de blogs y medios sociales, las empresas pueden no necesitar a las agencias de PR ya que ellas mismas establecen la relación con usuarios, periodistas y bloggers, el rol por excelencia de las agencias de PR.

    Ahora bien, la desaparición de los medios especializados, o de las agencias de PR, le quita profesionalismo a esta relación que al final termina por influir a los usuarios finales. Esto a la larga debería ser insostenible, en mi humilde opinión, aunque puede pasar que al soportar por mucho rato esta situación, se empiece a conformar una nueva industria: la de los medios sin contenido.

    De hecho esto no es descabellado. El único modelo de redes sociales que está siendo rentable, FaceBook, no se basa en el contenido que produce, sino más bien en ser una vitrina para el que quiera exponer su información. Ese parece ser el nuevo modelo. Las reputaciones ya no se harán por publicar en ciertos medios, sino por el número de amigos o seguidores –al estilo de twitter—y para lograr estos seguidores se valdrá todo: seducir, engañar, premiar…al fin lo que importa es tenerlos.

    Así que prepárese, señor ejecutivo de empresas o respetable periodista, que cualquier persona con más seguidores que usted en una red social, le podrá decir que hacer con su producto o su opinión. Y si esto ocurre más de uno que no conocemos estará hablandodeti.

  • PR 2.0: un Robin Hood perverso

    PR 2.0: un Robin Hood perverso

    robinhoodLlevo días dándole vueltas en la cabeza cómo escribir este post. No por que a algunos les pueda molestar, sino porque quiero que la gente lo entienda.

    Pero es que hay mucho ruido respecto a la Web 2.0 y aún hay mucha gente que no la entiende. Esto no es grave, a menos que las decisiones de estas personas que no entienden no afecten a los demás.

    Empecemos por describir a un periodista 2.0. Se trata de un ser más bien simpático, que sabe utilizar las herramientas tecnológicas para llevar a cabo su tarea diaria de informar. Hasta aquí vamos bien. Este ser viaja por la vida con una conexión de datos en su celular, quizás un MODEM que alguna telco le proveyó y con muchas ganas de contar todo lo que crea que le puede interesar a sus lectores. Ante todo se trata de un periodista.

    Hablemos ahora de los usuarios 2.0. Se parecen en mucho a los anteriormente descritos, salvo que lo que les mueve a producir y compartir contenidos, no es una profesión, sino más bien una especie de buena voluntad.

    A los primeros les pedimos que informen bien, con sindéresis, criterio para discriminar la información y conocimiento de los métodos de la comunicación. A los segundos los aceptamos tal como vienen. Son ante todo personas y los escogemos con los mismos criterios que escogemos a un amigo: interés sobre su conocimiento, puntos en común, localización geográfica, etc.

    Por último un medio 2.0 no es más que un lugar de reunión –o si lo prefieren un agregador—de periodistas 2.0 y puede contar con opiniones de usuarios 2.0.

    Nada nuevo hasta el momento…al menos para la mayoría de mis lectores, pero no para la mayoría de los PR de las compañías –un PR es el “especialista” en relaciones públicas de una compañía.

    Y es que casi todos los PR confunde a unos con otros. A veces es hasta divertido –si no estuvieran matando a los medios en el proceso– ver como un PR se desvive en complacer a un autonombrado periodista 2.0 –más bien un usuario 2.0 con ánimos de reportear—y dejan de lado a medios –y periodistas—de mayor importancia.

    La historia de esta crisis es larga, remonta al año 2.000 y la burbuja de las punto com. En ese momento de crisis un genio del mercadeo –al cual hay que levantarle una estatua pero encima de su carro— hizo su gran movimiento estratégico: convencer a su cliente de que dejara de invertir en publicidad y dedicara parte de esa inversión para PR. Como resultado le garantizaba una cobertura parecida o superior a la que obtenía normalmente.

    Entonces, actuando de Robin Hood Perverso, empezó a robarle a los pobres –en este caso los medios– el dinero y devolvérselos en parte a los ricos –los clientes. Si no pensamos más –y yo siempre recomiendo profundizar en las cosas—el esquema estaba bien para soportar la crisis. Los medios lo aceptaron, pensando que si ayudaban a los clientes cuando estaban mal, cuando las cosas mejoraran se acordarían de ellos.

    Muchos siguieron el ejemplo. Microsoft lo tomó a pie juntillas y se retiró del mercado de anunciantes creando una crisis en los medios de tecnología, crisis que pagó varias veces más cuando los medios, sin ningún reparo, atacaron su nuevo y flamante sistema operativo, que a la par de que no funcionaba en PCs viejas como ellos ofrecían, era una copia inconclusa de muchas características del Mac OS X.

    Recuerden que cuando salió XP hubo una situación parecida, pero los medios inclinaron la balanza hacia el ahora venerable XP, en detrimento de Windows 95 y 98 –ni nombrar Windows Me.

    Les recomiendo que lean a Dvorack hablando al respecto de esto, cuando filosofaba sobre la eliminación de la versión impresa de PC Magazine en USA. Es un texto sin desperdicio (http://www.pcmag.com/article2/0,2817,2337852,00.asp)

    Hoy día Microsoft intenta cambiar eso, pero aún no halla la mezcla adecuada. Espero la encuentre para Octubre.

    Por todo esto quiero llamar la atención sobre algunos errores comunes de los PR que veo en el día a día de mi trabajo.

    Error de PR 1: No saben calcular la audiencia. Aunque no lo crea esto sucede a diario. Yo veo como se matan por complacer a un periodista de un medio masivo, cuando lo que venden son soluciones de impresión de más de un millón de dólares, o cores bancarios del mismo precio. ¿Cree usted que un CIO comprará un sistema tan vital por tres líneas de información en un periódico nacional? ¿Será mejor contar con una audiencia especializada que lea una revista o un blog?.
    El error ocurre porque el PR, y los ejecutivos de mercadeo –si aún existen– piensan que la gente lee y sigue las mismas personas que el. Un post en un blog dedicado a noticias no vale igual que una cobertura de una página en una revista, una columna en un diario, o dos minutos de radio. No hay reglas absolutas, pero usar el sentido común ayuda.

    Error de PR 2: Ser tan “amigo” del periodista que le cuentan los errores del cliente. Como lo que importa es que te publiquen, la relación de amistad con el periodista lleva a que se junten a hablar mal del cliente. Créanme, este error es tan frecuente que si los ejecutivos de marketing dedicaran un poco de tiempo a investigar cambiarían a sus PR en la mayoría de los casos

    Error de PR 3: Ser 2.0 en un mundo aún 1.0. Se de muchos PR que dándoselas de 2.0 han llevado a sus clientes a proyectos con resultados mediocres –en el mejor de los casos. Un PR siempre ha sido 2.0, su valor está en las relaciones y las redes que se construyen. Pero si no se dan cuenta de esto, intentarán cambiar hacia algo que no existe. Ellos recomiendan bloggers, twitters y más, dejando de lado a los medios tradicionales e ignorando que las audiencias de estos generalmente superan en varias veces al alcance de las redes 2.0. Los verdaderos negocios aún se hacen de la forma tradicional, duélale a quien le duela

    Error de PR 4: quizás el más grave. Le quitan el dinero a los medios de comunicación –la publicidad—y pretenden ser amigos de los medios y periodistas para que les “ayuden” con sus clientes difíciles. Usan almuerzos, viajes y regalos como compensación a los anuncios y patrocinios.

    Existen más errores frecuentes, que pretendo ir revelando aquí si ustedes demuestran interés en conocerlos.

    Mientras, hay un solo resultado palpable de todo esto. Los medios son cada vez menos organizaciones al servicio de los lectores, y son cada vez más individuos 2.0 que usan su influencia para conseguir regalos y prebendas. Y lo peor es que la mayoría de los PR lo saben y prefieren seguir siendo cómplices y que no vaya a salir un individuo 2.0 por allí a decir en Twitter que él es un mal PR, algo que llamarían “mala prensa”, mientras que “mala prensa” es la que ellos han fomentado.

    Son numerosos los ejemplos de Individuos 2.0 que están en pelea con empresas por que no los invitan a almuerzos o no los llevan de viaje. Recientemente me ha tocado enfrentarme a una empresa de telecomunicaciones; ellos todavía no entienden que lo que les pido es respeto y que las revistas donde escribo estén en su plan de medios, ya que de allí es de donde proviene mi sustento y el de las mas de 45 personas que laboran conmigo en las revistas donde escribo. Ellos quizás piensan que regalándome un teléfono se soluciona todo, ya que eso hacen con los individuos 2.0 y les resulta. La lucha es dura, pero el tener la razón de mi lado me da fuerzas.

    ¿Por qué alguien podría interesarle que su información salga en las revistas en las que escribo si no considera siquiera mis medios para la pauta publicitaria?

    Si usted es un ejecutivo de mercadeo en una empresa de TI y tiene una respuesta afirmativa a esto, hágamela saber para publicarla y entonces estaremos ambos hablandodeti.

  • Colombia a punto de estrenar ley que regula las TIC

    Colombia a punto de estrenar ley que regula las TIC

    colombiacorazonEsta semana se aprobó en la Cámara de diputados y el Senado en Colombia una ley que regula las TIC en el país y fija un marco para desarrollar las telecomunicaciones.

    Uno de los principales puntos de la ley es la existencia de una licencia única para los operadores de telecomunicaciones que les permitirá operar libremente difernetes tipos de comunicación sin tener que volver a solicitar permiso. Además se consagra la neutralidad tecnológica del estado, es decir, que el estado no obligará a estos operadores a adoptar ningún estándar tecnológico en particular.

    Pero que mejor que contar con la opinión de una reconocida periodista colombiana que lleva ya años manejando la fuente de tecnología: Connie Pazos, a quien le pedí expresamente me redactara un pequeño texto al respecto:

    “Dos años duros tuvo el Ministerio de Comunicaciones para sacar adelante una Ley de Telecomunicaciones que por fin fue aprobada por la plenaria del Senado en la noche del jueves 18 de junio.

    Y es que en medio del avance que ha tenido el país en masificación tecnológica, lo único que faltaba era una regulación clara y visionaria que permitiera continuar con ese proceso.

    La nueva Ley de TIC unifica la planeación y control de los operadores de telecomunicaciones, aumenta la protección a los usuarios de los servicios de telecomunicaciones, abre las puertas a la neutralidad tecnológica y promueve el acceso a la tecnología en las personas de zonas apartadas.

    Entre los aspectos relevantes está el cambio que tendrá la Comisión de Regulación de Telecomunicaciones (CRT) que a partir de la firma presidencial, será la entidad encargada de promover la competencia, evitar el abuso de posición dominante y de no lograrse este último, regular los mercados de las redes y los servicios de comunicaciones.

    Para completar, se crea la Agencia Nacional de espectro (ANE), un ente que organizará el espectro radioeléctrico, un cuello de botella que hoy tiene al país en un desorden total.

    Con estos cambios, no sólo se podrán cumplir las metas de llevar a Colombia al liderazgo regional en el uso y apropiación de las TIC, sino que los usuarios por fin sentirán que la tecnología está para su servicio y no para que los operadores continúen atropellando con el abusivo y mal servicio que suelen prestar”

  • No son dos, son tres!

    No son dos, son tres!

    gradyboochSostuve una breve conversación con Grady Booch, un gran gurú del software (http://es.wikipedia.org/wiki/Grady_Booch) que trabaja como una especie de director conceptual de la marca Rational de IBM, y quise llevar la conversación hacia terrenos donde me manejo bien, mientras que los demás asistentes se centraban en cosas muy puntuales.

    Me metí en su área y le plantee que pensaba que ocurriría con la computación actual que, bajo mi punto de vista, se está dividiendo en dos grandes vertientes: computación de alto rendimiento y computación transaccional, ejecutada en paralelo. Un ejemplo del primer tipo son las grandes computadoras, como Blue Gene, que requieren que los programas sean hechos especialmente para ellas y tomando en cuenta una paralelización muy especial. Mientras que la transaccional, lo que hace es manejar varios núcleos de computo, y asignar programas a cada uno. El caso más notable de este último tipo son las famosas nubes de cómputo.

    Grady me miró un segundo, dijo algún cumplimento sobre la pregunta y rápidamente me dijo: “No son dos, son tres. Hay que agregar la computación en sistemas embebidos.”

    La verdad es que hasta el momento nunca considere la computación en sistemas embebidos –vamos, la computación que se genera en chips que serán usados en carros, teléfonos u otros dispositivos—fuera tan distinta de las demás, por que se parece mucho a la computación que he visto toda mi vida. Es como programar un procesador z80, o un 8086, con un juego de instrucciones diferente. Pero basta con detenerse un momento y darse cuenta de que ya esa no es una verdadera opción de programación en las PC. O al menos está por dejarlo de ser. Aunque estoy seguro de que en el mundo hay más PC equipadas con procesadores de un solo núcleo, lo cierto es que en breve no será así. Sólo algunos Netbook serán vendidos con estos procesadores, y el mundo de los procesadores mono-núcleo quedará restringido en breve a los dispositivos ultra-móviles.

    Por supuesto que la programación de sistemas embebidos tiene muchas diferencias con la programación tradicional que realizamos por mucho tiempo. Pero también es cierto que la programación para sistemas multi-núcleos pensados en las transacciones están evolucionando. Por ejemplo un servidor equipado con procesadores Intel Xeon 5500 –el famoso Nehalem—tiene 4 núcleos y 8 líneas de ejecución paralelas, y es tiempo que los sistemas empiecen a explotar estas ventajas. Si el mismo equipo incluye dos o cuatro procesadores, o 24, empieza a surgir la necesidad por sistemas operativos que aprovechen mejor esta infraestructura, y quizás el usar algunos principios de la computación de alto desempeño pueda ayudar.

    Así que Brady, con tu permiso, reformulo la pregunta: ¿cuál será el futuro de la computación en estas tendencias: de un núcleo, de varios núcleos usados transaccionalmente o de varios usados de manera altamente paralelizada?

    Y viene a mi mente la frase de Alan Key –pionero de la computación digital– que tanto le gusta a Brady: ¡la mejor manera de predecir el futuro es inventándolo!

    Quién me iba a decir que un día por fin estaría Grady Booch hablandodeti.

  • Las preguntas de la PYME: ¿Microsoft o Linux?

    Las preguntas de la PYME: ¿Microsoft o Linux?

    windows-linux-mercedesAunque muchos no lo crean esta pregunta es de fácil respuesta. No se trata de un cuestionamiento de esos sin salida al estilo de “¿qué es mejor: un mouse con un botón o con dos?”

    Antes de todo les refresco mi posición en este mundo: amante del software libre y respetuoso del software propietario, pero con gran pragmatismo tecnológico.

    Después de leer esas líneas estarán preguntándose que tipo de espécimen soy. Pues lo digo más claro: un Mac User. Sin fanatismos ni odios a ultranza.

    Una vez que estamos más claros –al menos eso espero—acerca de mi posición, les diré lo que he recogido a lo largo de mis doce años de periodista y casi 20 de tecnólogo autoproclamado.

    Para las empresas pequeñas el mejor software es el que le guste al dueño. Punto. Aquí la decisión casi nunca será por el precio de la licencia –¿asombrado?

    Es que resulta que el licenciamiento de software de las pequeñas empresas es una especie de lujo no permitido. Es como cuando pasamos ante el concesionario de Mercedes Benz y sin pagarle un solo euro a la corporación alemana nos escapamos mentalmente por unos pocos segundos sobre un Mercedes 500 compressor. Unos pocos entrarán a comprar el carro después de este paseo y los demás sólo se lo imaginan. Dadas así las cosas y teniendo en cuenta la gran cantidad de software pirata en estas empresas, hay que convencerse que la decisión no es por el precio. La decisión aquí es quien me arregla todo cuando –indefectiblemente—se dañe. ¿Es el sobrino del dueño un experto en Linux? ¿O es el mismo presidente de la empresa un empedernido instalador de Windows en PCs? Y es que una pequeña empresa quiere evitar al máximo los costos de asesoría tecnológica –groseramente costosa para muchos—así que depende de lo que le recomiende el recurso calificado más económico que tenga a su disposición. Y este generalmente suele usar Windows.

    En las empresas medianas es otro el cuento. Aquí el disponer de paquetes pre-hechos es lo que marca la diferencia. Si los desarrolladores de sistemas administrativos, ERP y otros se empeñan en usar Linux, en breve casi todas las empresas medianas lo usarán. Y aquí es donde Microsoft lleva ventaja pues tiene un ecosistema de desarrolladores ya constituido. Pero por otro lado, las presiones de las grandes empresas y en especial de los gobiernos, están forjando una comunidad de desarrolladores en Linux muy competente, por lo que la pelea en este campo será cada vez más dura. Es más si Linux gana esta batalla, o al menos la pelea de tú a tú con el gigante de Redmond, la realidad de la pequeña empresa puede cambiar drásticamente.

    Resulta simpático pensar que cuando usted monta su empresa, o la está operando, más de una viejecita le dirá que tiene un nieto que sabe muuuucho de computadoras y que es el Bill Gates local con tal de que le de un trabajo para pagar sus gastos de adolescente. Y la viejecita, aún sin saberlo, estará hablandodeti.