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  • El hombre: animal 2.0 por naturaleza

    El hombre: animal 2.0 por naturaleza

    evolucionEstoy en casa descansando un poco después de un largo día en la Cumbre del Futuro –que se debió llamar Cumbre del presente y el pasado inmediato—donde vi presentaciones interesantes –no necesariamente novedosas—de dos Chris: Sacca y Hughes.

    El primero de los Chris fue Sacca. Este habló mucho sobre su experiencia en Google y la filosofía de trabajo de la compañía. Estoy seguro que al terminar más de uno estaba pensando en enviar su currículo a Google, ya que eso de trabajar en un ambiente tan bueno –siempre estás a pocos metros de un refrigerador con snacks y una cafetera al lado—en el que además puedes –y debes—dedicarle hasta un 30% de tu tiempo a otros proyectos, debe ser lo máximo. El tiempo Google –como se le llama a este 30%– es famoso, por haberse constituido en uno de los principales motores de la innovación en dicha empresa.

    «Esta generación es proclive a compartir todo» sentencio Sacca en medio de su presentación y me recordé de la famosa frase de que el hombre es un animal social por naturaleza. Pasaron sólo unos pocos milisegundos antes de que mi cerebro la tradujera en la frase con que titulo este post (imagínenme absorto, en el evento, con la mirada perdida y mi cerebro haciendo la traducción de la frase, al mejor estilo de Homero Simpson) 🙂

    La verdad es que la charla de Sacca fue ilustrativa, aunque no muy novedosa. El único rasgo de “futuro” que hubo en la charla fue cuando recibió en su twitter un comentario de alguien que estaba molesto con su charla. Ese alguien, cuando fue llamado a aparecer, no dio la cara.

    El otro Chris, Hughes, fue un poco más ameno, especialmente al revelar el trabajo realizado con Obama en su campaña. Estoy seguro que mañana se leerá mucho sobre eso en los diferentes medios, pero para mi la frase más brillante ocurrió en una respuesta a una pregunta del público. Allí alguien lo cuestiono a opinar sobre cómo estas tecnologías podían usarse en nada más y nada menos que una Iglesia. «Dudo que se pueda establecer una iglesia virtual» respondió Chrias Hughes no sin antes pensarlo un poco. La verdad, no quería contestar que uno de los actos más sociales de la humanidad ocurren en los ritos religiosos, y que la tecnología está aún muy lejos de brindar esa atmósfera de recogimiento necesaria. Y es que las manifestaciones sociales del hombre seguro comenzaron por eventos místicos o religiosos, es algo curioso ya que es íntimo y social al mismo tiempo.

    Por otro lado, realice mi primera cobertura en twitter de un evento. Entren a twitter y hagan una búsqueda por aleon1969 y #cumbreccs para conocer los comentarios más relevantes del evento. De paso me gané como 30 nuevos seguidores, que desde ahora, también estarán hablandodeti.

  • Cibercriminales felices con Windows; peligros de ciberguerra latentes

    Cibercriminales felices con Windows; peligros de ciberguerra latentes

    kaspersky“Los cibercriminales están felices programando en Windows.” Que me perdonen mis amigos de Microsoft, pero esta frase se la escuche directamente a Eugene Kaspersky mientras lo entrevistaba hace apenas unos días. Aunque también he de decir que el mismo Eugene y el resto de los voceros de su compañía, reconocen que Microsoft ha logrado un gran avance en lo que a seguridad se refiere, y que han obligado a los hackers a orientarse más hacia el browser y otras aplicaciones –como Quicktime o Acrobat.
    Pero por muy fuerte que parezca, es así. A pesar del auge de Linux y Mac OS, la economía de escala se impone. La mayoría de los que programan virus y otras amenazas, empezaron con un PC y por eso allí siguen. Al contrario de lo que ocurre con los smartphones, donde la existencia de tantos sistemas operativos importantes –Symbian, Windos Mobile 5 y 6, Android, PalmOS, Blackberry OS, OS X, etc– ha dificultado el surgimiento de virus, salvo unas pocas excepciones en Java, el monopolio de facto de MS en el área de sistemas es lo que los hace tan apetecibles para los criminales.
    Eugene también conversó conmigo sobre el uso de software malicioso para realizar ciber guerras. Ante la pregunta de qué tan probable es que pueda ocurrir él dijo que el riesgo está muy lejos de no existir. Le insistí sobre si algún Estado usaba esta tecnología y conteto que era imposible de saber aún.
    Los pocos ejemplos de ciber guerras que se han visto permiten predecir un escenario de terror. De hecho, el mismo prefirió autocensurarse y no hablar más de ello, ya que le resulta preocupante –e incómodo—tocar estos temas frente a la prensa. Por más que insistí no logre que dijera más, el silencio fue absoluto y puso tensión en la entrevista.
    Y es que a veces, al tocar temas que pueden tener consecuencias tan graves para todos, hasta a mí se me hace difícil estar hablandodeti.

  • Michael Jackson y el caso de TMZ: ¿velocidad antes que veracidad?

    Michael Jackson y el caso de TMZ: ¿velocidad antes que veracidad?

    jacksonRecuerdo haber leído una mini biografía de Einstein en la cual se contaba que había sido expulsado – o al menos maltratado—en su patria natal, Alemania, en su juventud por que tardaba mucho en dar sus respuestas. Y es que al joven genio le gustaba analizar los problemas y dar una respuesta segura. Y todo este asunto de TMZ y la muerte de Jackson me hizo recordarme de esa anécdota.
    Mientras me encontraba en Dubrovnik, en un encuentro de analistas de virus de la empresa Kaspersky, me enteré de la muerte de Jackson, no por la TV o la prensa digital, sino por un mensaje que leí en twitter al momento de entrar para revisar mi cuenta en este servicio.
    Empecé a buscar información y empezó a aparecer algo en CNN.com, BBC.com y el sitio web de Los Ángeles Times. Todos hacían referían a la página TMZ como el iniciador de todo el “rumor” en que para ese momento estaba envuelta la muerte de Jackson, que sería confirmada sólo horas después. La posición de los medios tradicionales era de total cautela, sólo informaban lo que habían podido comprobar: que Jackson había sido trasladado al hospital.
    Hoy leo en la versión impresa de El Mundo –diario español—la gran hazaña de TMZ, de declarar a Michael Jackson muerto, seis minutos antes de que un juez hiciera lo propio de manera legal. Las siglas TMZ provienen de Thirty mile zone o la zona de las treinta millas, como se le conoce popularmente a la zona de Hollywood donde gran cantidad de estrellas del espectáculo tienen su residencia. El proyecto, respaldado por TimeWarner, cuenta con relaciones tan estrechas con la policía del lugar, así como médicos, bomberos y oros, que muchos los han acusado de pagar sobornos y premios por la obtención de la información.
    Llama la atención la comparación entre la actitud de los medios alternativos, el sitio web TMZ.com y los usuarios de twitter. Mientras los medios tradicionales en sus versiones digitales conservaron la prudencia que marca la ética, TMZ –quizás con información segura— mantenía que Jackson se había ido a cantar al más allá y como resulto cierto, es poco lo que se puede decir aquí.
    Pero los usuarios de twitter son otro caso. Sin ningún dato de primera mano, haciendo interpretaciones de lo que decían los diferentes medios electrónicos, armando conjeturas basadas en instinto y morbo, daban por hecho la muerte del cantante y el morbo crecia como una bola de nieve rodando montaña abajo. Si bien twitter me permitió enterarme de que algo pasaba con Jackson, no veo con buenos ojos que un usuario cualquiera proclame muerto a un ícono desde cualquier pueblito de Latinoamérica. Y muchos menos si son miles los que lo hacen. Por detrás de la motivación estaba figurar entre los primeros en decir algo, el orgullo de ser el más rápido, alimentado con la confianza de que si algo salía mal, nadie se acordaría de reclamarles. Esa es, a mi modo de ver, la espina en la ata del león del periodismo ciudadano y ya hemos vivido algunos ejemplos importantes, y si no lo creen busquen en su motor de búsquedas preferido a ver si averiguan cuantos fraudes de ese estilo ha habido, incluyendo uno en una sección importante de un gran medio periodístico, llamada iReport si no me recuerdo mal, que llegó a tumbar las acciones en la bolsa de una compañía de tecnología.
    Por eso es que yo en mi blog –y en cualquier otra parte donde escriba– prefiero mantenerme apegado al principio básico del periodismo de “ante la duda: abstenerse”. Allá aquellos que prefieren dar una noticia a realizar un servicio, que prefieran la velocidad a la veracidad.
    Quiero que siempre que estén habalandodeti, estén diciendo cosas ciertas.

  • Seguridad digital:un problema de compleja solución

    Seguridad digital:un problema de compleja solución

    kaspersky-logoHe de confesar que esperaba que los expertos de seguridad de Kaspersky me ofrecieran un panorama menos aterrador que el que yo mismo me imaginaba, pero sin embargo ha sido aún peor. El cibercrimen está tan bien organizado que cada día dificulta más las cosas a las compañías de seguridad. Y es que los cibercriminales han dejado de actuar convencionalmente y han establecido una economía completa, donde las normas de la oferta y la demanda regulan los precios y donde cada uno de ellos ofrecen servicios, que un comprador –no necesariamente diestro en tecnología—puede contratar para dirigir un ataque y además muy pocos de los involucrados sarán realmente cuál es el crimen cometido. Peor aún, en muchos países estarán incluso exentos de responsabilidades legales. Aunque parezca loco, es así.
    Digamos que usted quiere robar un banco en la vida real y compra armas, contrata ladrones, se hace de un vehículo y monta un plan. De agarrarlo la policía, iría preso, usted y toda su plantilla.
    Pero si quiere robar un banco de manera digital, busca una debilidad que pueda explotar –se la compra a un hacker que la haya descubierto o que haya desarollado herramientas para aprovecharse—y sale en busca de las otras cosas que le hacen falta: una lista de posibles usuarios del banco, una sitio web desde donde mandar el ataque, un spammer que envíe los correos con algode ingeniería social que los haga atractivos para abrirlos y digamos, una cuenta en donde recibir el dinero. Si la polici lo descubre, es poco lo que se puede hacer contra los involucrados, quizás solamente contra el cabecilla, que puede estar en otro país, y el que envió el spam, ya que todos los demás lo que hicieron fue dar herramientas, pero no las aplicaron. (En realidad esta es una burda simplificación d elo que ocurre, pero da la idea general)
    Para colmo de males, el ciberdelincuente ni si quiera se arriesga a ser herido, como le pasa a un ladrón convencional. Las soluciones a esto existen, pero involucran más que a las compañías de seguridad. Pronto estaremos hablandodeti sobre esas soluciones y las grandes implicaciones que tienen.

  • Cómo un mercado ¿vienés?

    Cómo un mercado ¿vienés?

    vienaSi leyeron bien, arriba dice mercado vienés. Generalmente cuando la gente encuentra esos paraísos de shopping llenos de cosas para comprar y a buenos precios la gente hace un comentario por el estilo de “parece un mercado turco—o persa” o “ni en las calles de Saigón”
    Pero la verdad es que aunque nunca he estado en Iran, Turquía ni en Saigón, si he estado en los mercados nocturnos de Taipei, en las calles de Shangai y su fake market, en el mercado de la seda de Beijing, en el mercado San Miguel de Madrid, o en los de Barcelona –hay uno cerca de Las Ramblas que por siempre recordaré por lo pintoresco del mismo— los de las calles de París –la rue Moufardette es un buen ejemplo—y hasta en Moscú en los lujosos centros comerciales llenos de compradores. Por supuesto también he estado en los mercados de América, desde el San Juan de Dios en Guadalajara, hasta los grandes mall de Estados Unidos, incluyendo uno gigantesco en Minesota.
    Pero he de ser sincero, nunca un aeropuerto me había arecido un sitio adecuado para comprar y generalmente las compras en tránsito son un mal necesario: algún recuerdo para la familia que no se pudo comprar antes, un magneto para el refrigerador o la compra más apreciada y conveniente: una botella de licor, perfumes o chocolates en el duty free.
    Pero hoy he cambiado mi parecer, al encontrarme de frente con el mayor mercado que jamás he visto en un aeropuerto, haciendo palidecer a algunos mas afamados, como el del aeropuerto Tocumén en Panamá. Se trata nada más y nada menos que el aeropuerto de Vienna. Lejos quedaron mis ideales románticos sobre la ciudad que aún tengo en mi lista de pendientes por visitar. No pude asimilar, en la hora que allí estuve, que estaba en la ciudad favorita de tantos poetas. Me imagino que la vida debe haber sido muy cara en el siglo XIX por que casi todos los músicos famosos –empezando por el buen amigo de Wolfang Amadeus—se dedicaron a confeccionar bombones, a juzgar por los cientos de cajas de bombones con sus nombres que estaban allí expuestos.
    Marcas como Nokia, Timberland, GX, ocupaban los lugares que yo en mi mente le había dado al Ministerio de Turismo o como se llame en Austria. En lugar de fotos de Shombrun, había dummys del Nokia Navigator. Bueno, al menos con un Nokia es mas fácil estar hablandodeti.

  • Café sin guayfí

    Café sin guayfí

    starbucks-barajasSentando en un Starbuks, en el aeropuerto de Barajas, hay dos cosas que laman mi atención: ni el café se parece al del Starbucks verdadero, ni hay acceso WiFi.
    Y no se trata de que sea un defensor del café de Starbucks, pero debo confesar que a punta de mokas tomados en todos lados, especialmente en San Francisco me he llegado acostumbrar a ese sabor. Este de aquí tienen un nosequé que no logro describir. ¿Quizás usan ColaCao como chocolate? ¿Será el agua de Madrid? En fin, será cuestión de acostumbrarse.
    Ayer, y gracias a la impuntualidad de Santa Bárbara –excelente santa para muchas causas, menos la de la puntualidad de los aviones—me tocó un día inesperado en Madrid, incluyendo cena en un museo del jamón, el de la Plaza Mayor, y pude observar como cada día avanza más la colonización americana de Europa –una especie de desquite, 500 años después—y de la que el Satarbucks de Barajas es sólo una pequeña muestra.
    Pero lo que si me parece inaceptable es que exista un Starbucks sin WiFi. Al fin y al cabo… ¿no es para eso que uno va a un Starbucks? ¿O será que hay gente que de verdad va por el café?
    En fin este post lo escribo desde el Starbucks de Barajas, pero veré desde donde lo envío, porque en realidad este Starbucks está como raro…creo que mejor voy al restuarante-tienda de Tio Pepe a ver si allí tienen guafí y puedo entonce estar hablandodeti.