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  • ¿Podrá Sony salvar el mercado de las consolas de juegos?

    ¿Podrá Sony salvar el mercado de las consolas de juegos?

    playstationquestion
    El Mercado de las consolas de juego ha permanecido estancado por mucho tiempo. Las tres consolas principales –PlayStation de Sony, Xbox 360 de Microsoft y Wii de Nintendo—han permanecido estáticas por mucho tiempo. Tan solo la consola Wii ha recibido una actualización, con la Wii U, y está apenas ha tenido un tibio recibimiento del Mercado. Sony también actualizó su flamante consola portátil, anteriormente PSP, con la nueva PS Vita y la reacción del Mercado estuvo lejos de ser calificada con superlativos.

    Ahora Sony parece que va actualizar hoy su consola PlayStation, con un Nuevo PS4. PlayStation es la consola más vendida del mundo, adelante de Xbox, aunque Microsoft lidere el Mercado norteamericano. Y quizás esa sea la razón de que el evento de lanzamiento de Sony ocurra en New York (el cuál estaré cubriendo personalmente).

    El año pasado Sony vendió 15.6 millones de PlayStation –PS2 y PS3—contra 11 millones de Xbox y 8 millones de Wii, según cifras citadas por el blog AllthingsD.com y Sony querrá aprovechar ese liderazgo para catapultar su nueva plataforma, la cual se rumora que va a tener compatibilidad con los juegos de PS3 y quizás con otros dispositivos que tienen certificación PS como los teléfonos y tabletas de Sony. De ser así, Sony podría estar incorporando tecnología de la empresa Gaikai que adquirió hace un tiempo, y que se especializa en juegos en la nube.

    De ser ciertos los rumores, el PS4 podría servir como una especie de servidor para que otros dispositivos se conecten y jueguen. O quizás más bien se trate de un sistema de licencias, donde el poseedor del PS4 pueda invitar a otras personas, que quizás tengan otros dispositivos, a jugar sus propios juegos. Sea como sea, los rumores apuntan a que la capacidad de hacer “streaming” sobre los juegos, es decir “transmitir” esos juegos a otros dispositivos, puedan ser la base de la propuesta de Sony.

    Ahora bien, la propuesta de tener juegos que de alguna manera puedan jugarse en teléfonos y tabletas –y más adelante hasta en TVs inteligentes—podría ser altamente efectiva para compensar la merma que estos dispositivos le han causado a la industria de las consolas. Juegos que exigen poco software –como Angry Birds—y juegos sociales –como Farmville para Facebook—han estado erosionando el mercado de las consolas. Darle capacidad a las consolas de juntar estos mercados sería parte de la receta para lograr un cambio.

    Pero la otra parte de la receta, sin la que no se logrará nada importante, es una rebaja consistente de precios, no sólo en la nueva consola PS4, sino también en la consola portátil Vita. El mercado exige precios más acordes con la realidad económica mundial, y ya hay rumores fuertes sobre que el PS4 podría contemplar un precio de inicio, menor al del PS3 en su lanzamiento, por hasta US$200. Esto pondría a la nueva consola cerca de los US$400, un precio sin duda más atractivo que el que tuvo el PS3, pero aún un poco alto para la actualidad.

    Esperaremos solo unas horas y veremos que noticias trae Sony y si logra o no convencer al mercado de lo interesante que es su propuesta. Al fin y al cabo Sony es una de las empresas con mayores posibilidades de impactar la industria del entretenimiento, al contar con empresas de cine, canales de TV, sellos de música, consolas de juego, PCs, Tabletas, Teléfonos intelgentes, TVs y hasta equipos de Audio, por lo que sería de esperar una mejora en la oferta de contenidos, juegos y aplicaciones, quizás con una tienda en línea capaz de rivalizar con la iTunes Store, GooglePlay y la Amazon Store.

    Estaré entonces este miércoles 20 y jueves 21 de Febrero, hablando de consolas, de juegos y de gamers, por lo que muy probablemente estaré también hablandodeti, querido lector.

  • ¿Puede el streaming de video cambiar la industria de la moda?

    ¿Puede el streaming de video cambiar la industria de la moda?

    nyfashionweek
    La semana pasada se llevo a cabo en Nueva York la famosa semana de la moda, en su versión de primavera, donde las grandes casas de costura suelen presentar sus modelos para el próximo verano. Se trata de un evento muy importante, que suele determinar ventas millonarias, debido a su gran influencia mundial.

    Sin embargo desde hace poco las grandes casas de costura están implementando transmisiones de video de sus desfiles, lo que les ha permitido aumentar el impacto de sus presentaciones, anteriormente reservadas a los asistentes. Los críticos de moda, antes el principal canal entre las marcas y el público en general, se sienten dejados de lado por este fenómeno y no falta quien realice predicciones del fin de la semana de la moda, a manos de las transmisiones de video.

    Ahora bien ¿por qué tanto miedo? Pues es natural.

    Basta recordar que los críticos de moda aún no se recuperan del primer embate serio en su contra, causado por la tecnología: los blogs de moda. Estos blogs de moda son tan populares en Estados Unidos y Europa, que quienes los escriben son considerados como críticos consagrados, con una mayor llegada ante las masas que muchos de los críticos tradicionales.

    La relación simbiótica entre marcas y críticos ha llevado a la industria a esforzarse en las pasarelas de manera antinatural, mostrando piezas de ropa que quizás nadie se ponga jamás en la vida real, todo esto sólo para impresionar a los críticos, que de observar una bonita colección de ropa, pero sin extravagancias, terminarían de calificar la colección como aburrida o más de lo mismo. Sin embargo, son estos mismos críticos, lo que después de ver las extravagancias de la colección, generalmente terminarán hablando de la parte comercial de la misma, para bien o para mal de las marcas.

    Y es esta anomalía –la de las extravagancias—la que podría desaparecer a medida de que los desfiles sean transmitidos a millones de personas de manera inmediata, sin pasar por la interpretación de los críticos. Ya no habría tiempo para esperar la interpretación del crítico al día siguiente. Si la gente normal quiere ver solo lo que puede comprar/usar, las fantasías tipo carnaval tendrían cada vez menos espacio en los desfiles, y por ende el juicio del crítico quedaría aún más relegado.

    Es más, las modelos están empezando a ser escogidas por como lucen en cámara y no en vivo, y aunque algunas podrán hacer el cambio sin problema, otras quedaran fuera y algunas nuevas llegaran a la industria.

    Un poco más allá, la semana de la moda no tendría por que realizarse en un solo lugar. Bien podría ser un evento digital, con desfiles en todas partes del mundo, y repartiendo los US$850 millones que genera para New York, entre varias capitales del mundo.

    En fin, el poder del streaming puede moldear muchos aspectos de la semana de la moda, y de la propia industria, y generar un negocio distinto al actual. No necesariamente mejor o peor, pero si distinto.

    Y puede ser que en breve, al hablar de la semana de la moda, en lugar de hablar de New York y de los críticos de la moda, estemos hablandodeti, querido lector, y de la tecnología de streaming de video que usarán las marcas para intentar venderte directamente la ropa de la nueva temporada.

  • ¿Es IPTV el futuro de la TV?

    ¿Es IPTV el futuro de la TV?

    Reed Hastings es una emprendedor nato. Fue Marine, miembro de los Peacecorps y Fundo una empresa de software que llegó a estar entre las primeras 50 del mundo, antes de venderla a Rational software.

    Pero hace ya unos años tuvo que pagar US$47 por la renta de una cinta de la película Apolo XIII que olvido devolver a tiempo y decidió que las rentas de las películas debería ser como las membresías de los gimnasios, donde se paga una renta mensual y se puede ejercitar lo que quiera.

    Hastings empezó entonces a cambiar la industria de rentas de videos, con precios muy bajos de alquiler y entrega por correo. Pero siendo un hombre diestro en tecnología — obtuvo un Máster en Ciencias de la Computación en la Universidad de Stanford en 1988—y estando en el negocio de la renta de videos, era poco factible que dejara de percibir el potencial de la renta en línea de películas y programas de TV.

    En una entrevista exclusiva en Bogotá –hasta donde llegó para lanzar el servicio oficialmente en la región– Hastings conversó con quien esto escribe acerca del futuro de la industria del video. Fueron muchos los temas conversados, como podrán enterarse al leer los medios donde escribo –PC WORLD y PRODUCTO especialmente. Pero uno de los más resaltantes fue la posibilidad de que la industria entera de la TV se convierta en una industria de IPTV. De hecho yo le señalé como en vistas a Asia he podido comprobar la existencia de algunos canales de TV que usan sólo esta tecnología para su difusión. Hastings se mostró enfático en que la transición de todos los canales de TV a IPTV no pasaría aún, pero que en cinco o diez años está tecnología sería dominante. Hastings cree en Latinoamérica como una de las regiones donde la banda ancha tiende a crecer más rápido y es por eso que establece su negocio en la región hoy día, a pesar de que está seguro de que no obtendrá ganancias en al menos unos tres años.

    Siendo así, Mr Hastings dejó claro que en la región hay pasión por ver TV, por adoptar tecnología y el ancho de banda está en aumento, lo cuál favorecerá a su negocio, pero también impulsará a otras iniciativas de IPTV. ¿Y esto le preocupa? Pues no, el dice que su servicio se compara más a un canal de TV premium que a un sistema completo, y que no duda que el aumento del ancho de banda lo favorecerá sin importar que algunos sistemas de cable, o algunas estaciones de TV se cambien a este sistema.

    Así las cosas, este visionario de la industria del video, ve todo tan claro que es capaz de invertir hasta US$70 millones en un mercado en el que sabe que no obtendrá ganancias hasta dentro de tres años.

    Haría falta que más visionarios tengan ideas tan claras de sus negocios, e inviertan en nuestras regiones para poder reseñar sus iniciativas desde estas páginas, y hablar sobre ellos, así como estoy ahora hablandodeti, amigo Reed.