El mercado de teléfonos inteligentes se ha convertido en algo muy entretenido de observar, gracias a Apple, Google y RIM. En estos días, y gracias al congreso en Barcelona, se han dado algunos anuncios que, además de interesantes, permiten adivinar un futuro muy dinámico en el sector.

RIM, quien figura como líder indiscutible de este segmento en el mercado de USA –con poco más del 40% del mercado de SO según Comscore—sabe que la perdida de terreno de un 1% en los útlimos meses, puede traducirse en pérdidas mayores si Android empieza a pisar más firme, y ha liberado una versión express –siguiendo la terminología de Microsoft—de su servidor BES para que lo puedan usar –de manera gratuita—empresas pequeñas. Esta versión permite usar el servicio BIS, basado en la Internet y los servidores de RIM, y combinarlo con algunas funcionalidades propias del BES –el servidor para servicios Blackberry con que cuentan las grandes empresas.

La medida luce inteligente, y permitió a RIM contar con un anuncio que contrarrestara el efecto del lanzamiento del Windows Mobile 7, adelantando un anuncio que hubieran hecho con gusto en su propio evento: el WES.

Por su parte Apple –el número 2 del mercado de USA con un 24% de participación—se mantuvo fiel a su línea de trabajar sólo, y se ausentó de los grandes anuncios en Barcelona. Sin embargo sigue potenciando su pilar principal: la tienda de aplicaciones. Seguro de que su foco no son las grandes corporaciones, sino más bien los usuarios –que harán lo posible por convencer a las empresas para que soporten los iPhone—Apple sigue atrayendo desarrolladores a su plataforma, que creen nuevas oportunidades de negocio. De hecho una novedosa aplicación que está por empezar a distribuirse permite a los autores no “tan” reconocidos publicar historias cortas en los iPhone, en una movida inteligente, que pone al iPhone, y por que n o decirlo: también al iPad—a competir con otros dispositivos como el Kindle de amazon.

Microsoft espera recuperar el punto de mercado perdido en los últimos meses para hacer valer su tercer lugar en el mercado de USA —con 19%– y superar a su eterno rival: Apple. El lanzamiento de Windows Mobile 7 quiere montarse sobre el éxito de su contraparte en las PC: Windows 7. La promesa principal es una interfaz mejorada que supere a la del OS X del iPhone y a la interesante propuesta de Android. La idea es reemplazar los íconos por “cuadros” o “mosaicos” que muestren no sólo las aplicaciones sino que –especialmente en el caso de redes sociales—reflejen las actualizaciones más recientes.

Por último –pero no por eso menos importante– queda el efecto Android. Este sistema amamantado por Google desde sus inicios, luce como un contendor con gran potencial. Aunque los informes sobre su relativo éxito se contradicen, Google acaba de anunciar en Barcelona que el sistema estará presente en 26 modelos de teléfonos distintos y que se están vendiendo unos 60.000 dispositivos al día . La ventaja clara es que empresas como Motorola o HTC –que saben diseñar excelentes dispositivos, pero son un desastre con los sistemas operativos—pueden concentrarse en el hardware y confiar en que el sistema operativo y las aplicaciones para el mismo crecerán adecuadamente. Otros esfuerzos de sistemas basados en software libre podrán crecer, como el caso de Intel y Nokia que fusionan sus sistemas Moblin y Maemo.
La única empresa que parece no moverse de forma tan inteligente es Palm. Aunque no están presentes en Barcelona anunciaron una nueva versión del sistema operativo que permite la descarga de aplicaciones desde el propio dispositivo y libera el límite máximo de aplicaciones a instalar, que existía previamente..

Definitivamente todos estos movimientos son muy inteligentes y habrán de volver al mercado de teléfonos inteligentes en uno de los más interesantes de todo el espectro tecnológico. Y es que hablar de teléfonos inteligentes, es estar hablandodeti.