Si bien no puedo negar que los nuevos teléfonos de Samsung, S6 edge+ y Galaxy Note5, lucen increíbles, la empresa está en un punto histórico, donde debería dar un paso atrás y reflexionar

¿Cómo puedo decir que los teléfonos lucen increíbles y que al mismo tiempo Samsung debe rectificar? Parece un contrasentido pero no lo es. Apple es “el gran mono que hace vibrar la cuerda” como dicen en EUA, no porqué venda más teléfonos, sino debido a que los que vende le alcanzan para monopolizar cifras cercanas al 80% de la ganancia que produce este mercado. Samsung sin embargo vende más y apenas tienen un pedazo de la torta como del 20% y que va en disminución.

Debo reconocer que el comunicado del lanzamiento de hoy es uno de los peores que pudo haber realizado la empresa. No se trata de las agencias de PR, ni de los involucrados en el desarrollo del mismo en el departamento de mercadeo de la firma coreana (aunque allí pueden tener más responsabilidad). Realmente la culpa es de la filosofía empresarial de Samsung. Apple pasó por una etapa parecida bajo el mando de Amelio Gil, donde los nuevos productos eran confusamente parecidos a los anteriores, cambiando sólo algunas especificaciones.

El edge+ y el Note5, al menos en el papel, no son muy distintos entre sí, ni ofrecen gran novedad para el usuario final. Frases edulcoradas del estilo de “permitirán mayor productividad a los usuarios” no son suficientes para convencer a los fanáticos de sus iPhones de lanzar por la borda sus equipos y comprar un Samsung. Es más, tampoco creo que logren convencer a los usuarios de Sony, HTC o cualquier otro fabricante, de manera más efectiva que lo que logra la empresa coreana actualmente.

Samsung ha fallado en crear una imagen de “experiencia” alrededor de sus teléfonos, algo que ya tenía logrado con el Galaxy S3, y no sabemos como dejó que se diluyera. Tampoco ayuda ala empresa el bajar los precios, ya que solo les resta rentabilidad, sin lograr amenazar efectivamente a Apple, el único y real enemigo a vencer. Mientras de a poco Xiaomi y Huawei se le acercan a la firma coreana, mientras que empresas como LG o Sony mantienen sus nichos, quedándose con buena parte de los usuarios de mayor poder adquisitivo.

Con el S4 Samsung no lo hizo nada mal, incluso en el S5 existieron indicios que se prestaban para desarrollar esta experiencia “única” con funciones como la de compartir/combinar altavoces o algunas funciones de fitness y salud. Pero en este lanzamiento la magia parece haberse difuminado por completo.

Samsung puede corregir ya que tiene tecnología genial y ojalá lo haga pronto. Sus tabletas son muy buenas, al igual que su hardware telefónico para Android y sus wereables lucen fantásticos. Pero no existe una experiencia real al combinar todos estos gadgets.

Espero muy pronto poder seguir hablandodeti Samsung y de tus aciertos en el área de dispositivos y registrar un cambio importante en el área de experiencia, que te permite seguir siendo el gran competidor que debes ser en el mercado gracias a tu tamaño y tecnología propia.