lunaSiempre me sentí honrado por haber nacido el mismo año en que el hombre llegó a la luna. Es más, siempre solíamos sonreír mi padre (QEPD) y yo con una broma al respecto: el nació en el 1937, el año en que se invento el carrito de supermercado, mientras que yo nací el año en que el hombre llego a la luna. Mis hijas nacieron en el 1996 y en el 2008, años en que se consolidaban la Web y la Web 2.0 respectivamente. Nada más revelador de los grandes cambios que hemos observado en estos pocos años, hemos visto el mundo cambiar al ritmo de las telecomunicaciones y la informática. Yo estudié una carrera impensable al momento de nacer: Ingeniería en Computación. Mis hijas…quién sabe que profesión podrán seguir, qué quizás hoy mismo no exista.

Un mes separó mi venida al mundo del hecho más trascendental de la historia moderna. Hoy viendo los innumerables especiales en los canales de TV al respecto, he logrado sentir un poco de la emoción que debe haber inundado al mundo en aquel momento.

Pero desde el punto de vista de tecnología parece asombroso que lo hayan podido lograr. Todo basado en switches, circuitos burdos, algunos pocos chips. Estoy seguro que cualquier PC casero de hoy día debe tener varias veces más poder de cálculo que toda la lógica del modulo lunar. Es algo parecido a lo que sentí al montarme en el Concorde en Francia –lamentablemente en un museo, y no volando en él. La tecnología que se uso allí ha sido superada con creces, pero el buen uso que allí se le dio, permitió hacer mucho y eso debe de servirnos de ejemplo.

Se puede hacer mucho con la tecnología disponible, no necesitamos tecnología moderna para despuntar. Un ejemplo de eso son las redes 2.0, donde sitios como Twitter o Facebook, sin ningún algoritmo raro y ultraeficiente, han logrado cambiar el mundo de nuevo.

Les invito a visitar la página de la NASA (http://www.nasa.gov) una página que siempre visité y que sirvió de inspiración en aquel lejano 1996 cuando lanzamos la primera página oficial de la Universidad Simón Bolívar. Ese mismo año, además de nacer mi primera hija, realice otras cosas interesantes, incluyendo la primera cobertura de un evento deportivo de clase mundial, las Olimpiadas de Atlanta 1996 (http://www.internet.ve/amecs/atlanta96/ )

Todavía recuerdo el revuelo que causo la página de entrada con fuegos artificiales animados (http://www.internet.ve/amecs/atlanta96/entrada.html)

Todos esos hechos han labrado la persona que soy, han moldeado al profesional que hay en mí. Son esos hechos los que hoy me permiten estar hablandodeti con ustedes.

Nota: la foto que ilustra la nota fue tomada por mí, usando mi cámara Olympus SP-560UZ con zoom de 18X) y sirve para que busquen las famosas imagenes del hombre en la luna o la del conejo en la luna (de la tradición china)