Hoy es mi cumpleaños número 55, algo que me tiene muy feliz. Apenas pasada la medianoche entré en el Neighborbook –la aplicación local que sustituyo a Facebook hace ya algunos años—para ver y escuchar las felicitaciones de los amigos, casi todas en 3D. Incluso he recibido felicitaciones de un centenar de personas que no recuerdo conocer.
Hoy decidí darme licencia, y no actualizaré mis videos en hablandodeti.media – y pensar que van ya quince años desde que eliminaron los anteriores top-level, como puntocom, para sustituirlos por una cantidad mas amplia de dominios con varias letras: .blog, .business, .corporate, etc.
Haciendo memoria sobre estos fructíferos años quizás lo que mas echo de menos es la existencia de medios especializados, los que desaparecieron por completo tras la crisis del 2015, donde algunos “genios” decidieron “echar el resto” y terminar de eliminar los presupuestos de publicidad. El resultado fueron unos pocos medios que sobrevivieron, robando información de donde pueden y aglomerándola en un sólo sitio –las revistas se dejaron de imprimir en el 2020, pero desde antes sufrieron un gran impacto. La desaparición de la radio –al menos como las conocíamos en el ya lejano 2010—ocurrió poco después, y hubiera sido total de no ser por el surgimiento de los sistemas de radio por suscripción. Pero aún en estos sistemas, los programas de opinión son escasos.
Pero lo peor es que todos los periodistas – o al menos la gran mayoría—han tenido que incorporarse a las empresas que anteriormente eran sus fuentes. Allí los gigantescos departamentos de Marketing social –o marketing, a secas—no hacen sino quejarse de que el trabajo ya no es tan fácil como antes. El empoderamiento de los usuarios, y la eliminación de los medios, los dejaron al descubierto. Los influenciadores de oficio –incluso algunos graduados en universidades—son también presas de los caprichos de los recién llegados que buscan construir su reputación en base a destruir a los demás. De hecho algunas empresas, ante la imposibilidad de controlar este caos, han empezado a cerrar sus departamentos de mercadeo, y sus ejecutivos están optando por hablar directamente con sus clientes, eliminando una costosa estructura.
Cada día se incorporan cientos de usuarios a las redes de las compañías y resulta difícil seguirles el paso. Pese a los nuevos sitios web para agregar contenido social, el seguimiento de la información es aún engorros. Son millones de voces gritando al unísono, y unas pocas personas intentando escucharlos. Cada vez es más frecuente ver periodistas que deciden dedicarse a la escritura de relatos de ficción, como forma de expresión de su talento.
Veo con esperanza el último proyecto que se nos ha ocurrido a un grupo de amigos: juntarnos para depurar un poco el escenario, estableciendo normas y cánones del ejercicio y de la ética. Algo que debió haber pasado hace mucho, cuando aún esto se podía evitar.
La comunicación, que es hoy más directa, y cuenta con mas recursos, se ha vuelto también más compleja. Así como la computación dejó de ser privilegio de pocos para estar al alcance de todos, las redes sociales han democratizado el acceso a los medios. Pero a diferencia de aquella industria, donde comités y grandes empresas fijaron estándares para el crecimiento, la comunicación se ha vuelto más libre. Pero ser libre y sin control no es algo necesariamente bueno. Pareciera que en vez de estar hablandodeti, las personas y las empresas no hacen más que estar hablando de si mismas. El proceso comunicacional, se ha roto entonces.
*De ninguna manera quiero significar que este sea el futuro al que nos enfrentaremos, pero es una de tantas realidades posibles, y lo escribo como reflexión propia de lo que debemos hacer los medios, periodistas y empresas de cara al futuro.
Ciertamente amigo, que imaginacion tan prolifica.. Dios sabe que nos deparara el futuro, pero probablemente sea algo como eso.. Yo por mi parte espero estar conectado via «brainwaves interface» al internet (o googlenet) y aprovechar para echar unas lineas de codigo en mi nueva laptop con interfaz 3D basado en el nuevo procesador basado en nanomeds con velocidades de 300 Peta-Hertz..
ahh soñar no cuesta nada no? Todavia estoy esperando los carros de los Supersonicos que estarian con nosotros en pleno Siglo XXI..
saludos,